Music

Andrea Echeverri: una Rockera con Mamitis Aguda

Read more
Cuando se anunció el verano pasado que Andrea Echeverri formaría parte del festival de Celebrate Brooklyn, hubo confusión y pánico entre los fans: se separaban Los Aterciopelados? No tocaría los clásicos? Resulta que durante sus shows en Brooklyn y en SOB’s el agosto pasado estaban los usual suspects: Héctor en en el bajo, Alejo en guitarra, Florecita Rockera y BoleroFalaz en el repertorio. El separation anxiety se nos calmó entonces, pero ahora que sale el disco a la venta, nos vuelve dar nostalgia de aquello que ya es vintage Aterciopelados.La ahora super mama Echeverri (tuvo a su hija Milagros en abril del 2002) es autora de todos los temas y tuvo total control creativo del disco Andrea Echeverri. Nos dijo Andrea tras bastidores antes del show de Brooklyn: “Durante el embarazo y el nacimiento del bebé me salieron muchas canciones, unas para la niña y para el papá de la niña. Eso es lo nuevo, es como la parte femenina de Aterciopelados, no tanto porque me lancé como solista como dicen.” Sigue siendo una colaboración de los Atercio, con Hector produciendo el disco. Añadió Héctor: “Traté de interpretar lo que ella quería en cuanto a los arreglos musicales sobre todo, que es un disco con más guitarras, más adulto, más femenino.”

Como el nuevo disco de fellow rockera Ely Guerra, Andrea se ha ido all-around femenina y proclama las dichas del amor a los cuatro vientos. En su último Sweet and Sour, Hot y Spicy, Ely Guerra está enamorada y coqueta y es lo único que nos cuenta. Igualmente, Andrea Echeverri se centra solamente el embarazo y el amor. En el 2003, cuando la revista Rolling Stone inauguró su edición andina, Andrea salió en la portada posando como un cuadro clásico de madonna y niño. No hubo tanta conmoción ante un parto desde que Madonna tuvo a su Lourdes, y aún asi Ray of Light no era un album solo sobre la maternidad. Andrea Echeverri es un snapshot de esa Andrea; embarazada y post-parto, ahora con pareja, y una nueva actitud zen. Temáticamente, no muestra esa complejidad (tan rica en sus otros discos) de los altibajos de la vida. Olvídense de “veo que la cosa no es color de rosa, todo me huele a que se pudrió!”, ahora es “A tus pies estoy yo te adoro, si no estas a mi lado te añoro”. Porqué ese sinsabor al escuchar el disco? Padecemos de nostalgia de esos Aterciopelados vintage, de Aterciopeladitis? Quizás es el darnos cuenta que después de tantos años, aún tenemos las ganas de ser rockeras, y cantar a dúo con Cerati y tatuarnos los brazos. Y esa paz interior y radiación de felicidad? Inaudito!

En el concierto en Prospect Park, Andrea exclamó a la audiencia: “que noche más linda, que lindos los árboles, gracias a ustedes, los árboles, el cielo y el universo.” El ambiente era zen en el escenario, y no olvidemos el pulpo de peluche (“juguete de Milagros”) como instrumento de percusión. Ok, asi que canta sobre ser mamá, pero también nos empuja el tema en la instrumentación? La pobre back-up singer, Sol, se pasó más tiempo meneando el pulpito y otros juguetitos que cantando. Durante la canción “Ya Yo No”, Andrea levantaba los brazos al cantar el coro “ahora somos nosotros.” Y luego, pausa. “Nosotraaaas!” levantando el puño y poniendo cara seria, dándonos un vistazo de la etapa rebelde de antaño.

Los Aterciopelados siempre han estado a la vanguardia de la escena musical en Bogotá, y Andrea nos comentó que ahora hay un movimiento llamado Nuevo Folklor, con bandas con influencias tradicionales “haciendo cosas bien interesantes, que mezclan el folklor con rock, jazz o electrónica”. El nuevo disco no es así de folklórico, pero si es mucho más acústico y sereno que pasadas producciones. Es una tendencia que ya se empezó a ver en Gozo Poderoso, pero Andrea Echeverri no tiene esos loops electrónicos que distinguen el sonido de Hector.

El primer sencillo, “a eme o ”, habla sobre…si, el amor madre-hija, y nos gustó más la versión remix de Richard Blair de Sidestepper (el bonus track). Otro tema, “Imán”, presenta un dueto entre Andrea y su madre Amparo cantando sobre…el bond madre-hija, está vez versión reino animal: “Vuelo a buscar lombrices, calmar su hambre me exiges… Mi cachorro, mi pichón, me has robado el corazón”. Hacía tiempo que Andrea quería grabar con su madre, pero aún no se había presentado la oportunidad adecuada. “Para una persona que ha cantado toda la vida con guitarra, cantar con sonidos electronicos no es fácil” dijo. Valió la pena esperar, por que es toda una revelación escuchar la voz grave de Amparo y reconocer de dónde salió la afamada voz profunda de Andrea. Este disco es bastante unplugged y la voz de Andrea es más aguda, pero en este tema luce brevemente la voz de antes.Definitivamente, el tema más logrado del disco es “Lactochampeta”, producido por el compañero de Andrea, Manolo Jaramillo (un historiador y artista colombiano). La champeta es un tipo de música de la costa caribeña colombiana, raunchy como puede ser el reggaetón, o en palabras de Andrea, “de letras sensuales no del mejor gusto, sí o que?”. En “Lactochampeta”, se mezcla la sensualidad con la maternidad, con un ritmo que suena a latidos del corazón. Imagínense un concierto lleno a capacidad, y todos cantando a gritos el coro: “Chúpate la tetica, tómatela todita… Pon tu boquita en mi pezón y con la encia haz presión…Como chupas de ricooooo”. Se nos olvida que estábamos reacios al tema embarazo y bailamos al ritmo contagioso de ese bebe chupando tetita…o el amante chupando otra cosa. Hermoso!

El porvenir para Los Aterciopelados? Promocionar Andrea Echeverri por el continente y ahora le toca a Hector grabar su disco. “Ultimamente he escuchado mucha música electrónica y grupos como Coldplay y Radiohead. [Mi album] no va a ser mucho formato canción sino mas electrónico, más experimental” aseguró Hector. Y Andrea no descarta la posibilidad de seguir pariendo. Quizás para ese entonces, ya se nos haya pasado la Aterciopeladitis y podamos enfrentar el cambio. Ojalá para ese entonces Andrea varíe un poco sus canciones y no se olvide que aunque todo cambia, su ironía, feminismo e inconformidad es lo que nos sigue enganchando.


Photo Credits: Cortesía de Nacional Records