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Hablar de traspasos en esta época del año es normal en el mundo del fútbol, pero cuando hablamos de que Lionel Messi podría dejar el club Catalán se trata de la noticia más importante en el mundo del deporte en el Siglo XXI.
El argentino de 33 años inició su carrera en el Barcelona el 14 de septiembre de 2000, cuando su padre se comprometió legalmente—firmando en una servilleta—a que el Astro hiciera parte de ‘La Masía’, la academia del club.
Allí empezó su sueño, pero además comenzó la historia del jugador que más alegrías le daría al Fútbol Club Barcelona y que es considerado por muchos amantes del deporte como el G.O.A.T (Greatest Of All Time).
Decir Messi es decir fútbol. Es un delantero, un volante, un alero, es un deportista polivalente e impresionante y que genera pasiones desbordadas. Por eso, cada noticia que lo relacione genera repercusión en cada lugar del planeta.
En el 2010 empezó a darse un suceso extraño en el Barcelona y fue el rumor de la salida de Lionel Messi del club. Pero, todo se soluciona en 2011 con la renovación de su contrato por 3 años más, acompañados de millonarios aumentos salariales. Y así sucedió cada tres vueltas al sol. Se decía que podía irse en 2013 y en 2014 renovó. Se decía que podía irse en 2016 y en 2017 renovó. Se dijo en 2019 que podía irse y en 2020… está más cerca que nunca de irse.
Quizá el hecho de su renovación ha generado incomodidad entre sus detractores pero, como club, se debe hacer grandes sacrificios para mantener al jugador franquicia y eso ha hecho siempre el Barcelona—tratar de satisfacer cada necesidad de Lionel Messi. Además no hay ningún reproche porque el ‘10’ tiene una hoja de vida intachable como deportista dentro y fuera del campo de juego.
El club ‘Culé’ lleva varias temporadas en declive deportivo, sin ganar la Champions League desde 2015, pero viendo a su más grande rival, Real Madrid, levantar la copa más importante en tres oportunidades.
Pero la caída también ha sido económica, pues en los últimos años, el Barcelona ha dejado de confiar en lo que siempre lo caracterizó y Messi es su mayor grande ejemplo: cultivar talentos y explotar sus habilidades al máximo.
Por ejemplo, el club, bajo la dirección de Josep Maria Bartomeu, ha gastado cerca de 358 millones de euros en Ousmane Dembélé (suplente), Antoine Griezmann (suplente) y Philippe Coutinho (prestado al Bayern Múnich) en jugadores y entrenadores que no tienen filosofía de “fútbol total” de 11 jugadores conectados en una misma idea de juego haciéndolo bien y bonito.
A toda esta difícil situación hay que sumarle un hecho histórico: la derrota del ‘Barça’, 8-2 ante el Bayern Múnich en los cuartos de final de la Champions League. Una humillación histórica ante el que terminaría siendo campeón, en la que Messi estuvo desaparecido y fue el blanco de todas las críticas porque no se le vio para levantar el ánimo de su equipo que lo necesitaba como capitán.
Esto probablemente hizo que Lionel Messi, quien en 2017 afirmó: “Es mi casa. Siempre quise pasar toda mi carrera acá y siempre he dicho que mi sueño era terminar en el Barcelona,” quiera irse.
Las posibilidades de cara al futuro para Messi son cinco:
- Quedarse en el Barcelona, pero si Josep María Bartomeu se va.
- Irse al Manchester City, el club que dirige Pep Guardiola —el entrenador con quien más tiempo estuvo en el Barcelona (2008-2012); sumado a que es un equipo multimillonario que podría pagar los más de 30 millones de euros que cobra Messi anualmente.
- Irse al Paris Saint-Germain, un equipo que económicamente tampoco tendría problema en apostar por él.
- Irse al Inter de Milán, un equipo que ha renacido económicamente con la inversión China y que podría crecer más con una la figura del capitán de la Selección Argentina.
- La íntima decisión de retirarse del fútbol, al mejor estilo de Michael Jordan en 1998, pero que es poco probable por el hambre de victoria que aún se le ve al nacido en Rosario.
A medida de que haya más información, le mantendremos actualizado.